¡Bienvenida!
Soy Mónica, nací en Barcelona hace ya algunas lunas. Desde muy joven, he viajado, vivido y trabajado como artesana en rincones tan diversos como Grecia, Italia, India, Egipto, Marruecos…
Cada lugar ha dejado su huella en mí, no solo en mi técnica, sino en mi manera de entender la vida y el arte.
Me inspiro en las antiguas tradiciones y en las formas orgánicas que nos conectan con nuestras raíces.
Hoy, mi taller de joyería y lapidaria se encuentra en Olargues, un pequeño pueblo en el corazón del Parque Natural del Alto Languedoc, en Francia. Aquí, rodeada de montañas, ríos y bosques, encuentro la inspiración que da vida a mis creaciones.
En mi taller, la naturaleza no es solo una fuente de inspiración, sino el alma de cada creación.
Trabajo con plantas silvestres recolectadas en los alrededores y piedras seleccionadas con cuidado, combinando su esencia para dar forma a piezas que son mucho más que joyas: son amuletos, símbolos de conexión con la tierra y con la energía que nos rodea.
En cada joya, la piedra, la planta y el metal dialogan, fusionando su poder en una armonía que evoca la magia de lo simple, lo auténtico, lo eterno.
Cada marca cuenta la historia de un momento de creación, y mis manos y herramientas — pinzas, soplete, martillos, limas — son los únicos intermediarios entre la idea y su materialización; una curva irregular, una ligera asimetría, una textura inesperada: un diálogo entre la materia en su estado más puro y la emoción del instante.